viernes, 10 de septiembre de 2010

Nuevo México

Nos levantamos relativamente temprano y nos fuimos a desayunar al big texan. Obviamente un desayuno digno de titanes y que gracias a dios tuve la fuerza de voluntad suficiente para rechazar y pegarmelo de fruta fresca (mi estómago está resentido de la comida de aquí). De allí nos fuimos a ver "Cadillac Ranch" y directamente para Roswell sin pasar por la casilla de salida:


Roswell tiene un olor particular que no sabría definir, pero huele a campo. Cuando digo campo no me refiero a rosas, margaritas y tulipanes; me refiero a campo de ganado. No sé si tiene algo alrededor (fabrica) que hace que huela así, pero es un olor peculiar. La gente en Roswell también es bastante agradable, y el pueblo entero está tomado por el fenómeno "Alien". Las tiendas son Alien-x (Alienware, alien tal, alien pascual...), hay marcianos por todas partes...ah! y por si alguien se pregunta (que ya me extraña) cómo son las farolaas de Roswell...pues ahí va una foto:

Son de lo mas chulo que existe en este mundo. Bueno, en Roswell no hicimos mucho, además de pasear por sus calles (estaban de fiesta del chili, con musica callejera, coches tunning (pero del bueno, no de tintar cristales y poner un alerón...), puestecillos de los que salen en las pelis de niños vendiendo limonada, brownies e incluso salsas dip...etc. Nosotros por nuestra parte comimos en Gizmo´s y nos fuimos (obviamente) al museo internacional del marciano, donde nos infor5mamos  un pokillo del fenómeno ovni, y en particular del caso Roswell:
Y ya nos fuimos a buscar hotel porque teníamos que preparar nuestra incursión, al día siguiente, en el crash site. Un error, puesto que buscando info sobre cómo llegar, encontramos que por el lugar habitan serpientes de cascabel, bicho al que no le tengo especial aprecio. De todas formas, D apuntó bien el sitio y con el canguelo en el cuerpo (al menos yo) nos fuimos a dormir. Canguelo porque mientras buscamos el sitio pueden darse diferentes situaciones:

1.- Serpiente de cascabel, mordedura y consiguiente muerte, debido a que estaremos en mitad de la nada, a varias millas de cualquier parte y a saber cómo llegaamos al hospital (ese es mi punto de vista).
2.- Que nos salga el granjero dueño del rancho escopeta en mano viendoo que dos tipejos con pinta de guiri se cuelan en su rancho entre sus vacas. Obviamente el granjero se piensa que queremos hacerle algo a las vacas, robarselas, envenenarlas o algo parecido, ya que aquí parece que son desconfiados si te acercas a donde no debes (ese es nuestro punto de vista, y tomo como referencia al "chico del maiz" en Illinois comentado en anterior post). Tiro y consiguiente muerte.
3.- Que se produzca la situación 2 pero que el tiro sea fallido, pero que al agacharnos asustemos a una cascabel, mordedura y consiguiente muerte (al menos de 1). Esto ya es un combo y morir así debe hacerte sentir orgulloso de tu mala suerte.

Estas son las principales, pero D tiene alguna más (integramente suya) que implica tarántulas, viudas negras, cascabeles y granjeros...pero eso ya es otro cantar...

=D=
Pues bueno, tras un copioso desayuno en el Big Texan N y yo decidimos dedicar un ratito a hacer la digestión tranquilamente, en una mecedora que el Big Texan tiene la deferencia de poner a disposición de su clientela. Sí, dije bien: N y yo en UNA mecedora. Para los malpensados, aclarar que a pesar de que estábamos en la misma mecedora, no solo no me tuve que sentar en las rodillas de N, sino que ni siquiera nos tocamos:


Tras pasar un ratito balanceándonos tranquilamente, nos piramos del BT y como ya comentó N nos fuimos al Cadillac Ranch, donde N dejó constancia de sus inquietudes artísticas en un Cadillac del año de la pera esnafrado a las afueras de Amarillo:




Tras esto, pusimos rumbo a Roswell, donde N ya dejó clara constancia de lo que vimos e hicimos. Tan solo explicar un poco el por qué de nuestra visita al pueblo de los marcianos. Roswell es un poblacho del sur de Nuevo Méjico donde en 1947, se produjo el incidente OVNI más famoso de la historia. Supuestamente allí (bueno, no allí si no en un rancho a tomar por culo de cualquier parte a unos 100 km de allí) tras una tormenta eléctrica un vaquero encontró un platillo volante espetado contra unas rocas con varios marcianos muertos dentro, y alguno vivo y malherido fuera. Así que el vaquero, acojonado, fue a chivarse al Sheriff de Roswell, quien avisó al ejército. Inmediatamente la milicia tomó el control del asunto, al vaquero lo tuvieron 10 dias detenido, y cuando lo soltaron, dijo que en realidad había mentido y que no había ni marcianos ni platillo volante, que lo que se había hostiado en su rancho era un globo metereológico del ejército. Paralelamente a esto, el Sheriff junto con los militares se dedicaron a acojonar a todo el pueblo y a amenazar de muerte a todos los que habian hablado con el vaquero antes de que le leyesen la cartilla los militares. Los testigos y el vaquero, que no tenian un puto duro, se fueron del pueblo amargados pero cargaditos de dólares (supuestos sobornos por tener la boca cerrada, que en combinación con las amenazas de muerte parece que funcionaron). La leyenda cuenta que los implicados en acojonar al pueblo, Sheriff y diversos mandos militares vivieron llenos de remordimientos y en sus lechos de muerte confesaron a sus familiares lo que en realidad habían encontrado: marcianos y un platillo volante que los militares se llevaron a no se sabe bien dónde. Las consecuencias, tratándose de los USA, eran predecibles. Roswell es una meca friki que es un descaro. Hamburguesa marciana por aquí, museo marciano por allá, la tienda del marciano, el coctel marciano, marcianos dando la bienvenida al pueblo...y hasta el "marcianito cowboy":

Inmediatamente N y yo supimos cual era nuestro deber: Ir al punto exacto donde se hostió la nave, en un rancho del desierto de New Mexico (¿para qué coño nos gastamos la pasta en un 4x4?). Asi pues, planeamos la excursión para el dia siguiente. Fuimos a nuestro supermercado favorito, el Walmart, y a nuestra sección favorita, Hogar, para conseguir todo lo que necesitábamos:
A mí me gustó la Remington con capacidad para 5 cartuchos de posta lobera, pero N confiaba más en las balas de punta hueca que sostiene en esta foto...bueno, al final solo compramos fruta y agua, no sé, nos pareció más práctico. Así pues, con el miedo atenazándonos como ya comentó N y la certeza de una muerte segura, nos fuimos al hotel para al día siguiente alcanzar la zona cero del caso Roswell: el crash site, situado en un rancho que Iker Jiménez ya calificó en su día como "un lugar muy, muy remoto del desierto de Nuevo México..."

3 comentarios:

Salvito dijo...

Que envidia dais, no te olvides de mi para el hanami del año que viene, que como tenga dinero me apunto

Salvito dijo...

JAJAJAJA, veo que tenis cubiertas las 3 posibilidades con las que os podeis encontrar xD, como todas acaban en muerte, estaba yo pensando que podrias hacer un testamento o algo asi.

Un abrazo!!

Anónimo dijo...

genial la ciudad meeeeeeeeeen xD
las farolas... la ostia!
la comida de alli....bueno yo no digo nada.. pero seven barriguitas ehh? xD